Desde la ADF entrevistamos a nuestra socia Mariana Russo (ADF) por su trabajo como DF en “La vida de a ratos” (2025), dirigida por Bernarda Pagés y Javier Lombardo, la cual se estrena el 8 de Julio de 2025 en el Cine Gaumont.
“La vida de a ratos” es una película conmovedora que aborda el Parkinson de una manera original, sensible y con momentos de humor, explorando el sentido de la vida frente a la enfermedad.
–Contanos cómo llegó este proyecto a vos y qué fue lo que despertó tu interés en el mismo.
“La vida de a ratos” me llega como propuesta de su directora Bernarda Pages. Berni empieza sus películas de una manera muy intuitiva, cuando ella me llama le digo que sí, casi a ciegas, porque sé que se interesa por temas muy humanos.
–¿Cuánto tiempo antes del rodaje empezaron a trabajar en la peli? ¿Qué tópicos aparecieron en esas primeras charlas estéticas?¿Hubo referencias que hayan barajado en ese tiempo? ¿Cuáles?
No hubo tiempo de preproducción ni de trabajar referencias, antes de filmar. Yo estaba dando clases en la EICTV en Cuba cuando Berni me propone acompañarla a Río de Janeiro para iniciar la filmación de un encuentro importante entre el protagonista Javier Lombardo y Rüdiger Dahlke escritor de “La enfermedad como camino”. Berni me cuenta del proyecto y lo importante que es para Javier está instancia porque el libro lo ayudó a transitar su enfermedad. Ese fue el punto de partida, la punta del Iceberg. Conocí a Javier en el aeropuerto camino a Brasil y allí retraté el inicio de este viaje con absoluta confianza suya y de Berni que ya estaba en Rio de Janeiro haciendo preproducción. Ese fue el inicio con mucho contenido, sabíamos que teníamos en manos un tesoro, la película se iba a basar en ese encuentro. Entonces recurrimos a una segunda cámara local de apoyo para poder tener tanto a Dahlke y las reacciones de Javier en cámara, pero solo en el hotel. El viaje duró 3 días y en esas jornadas solo estábamos Berni, Javier y yo. La idea fue aprovechar al máximo el contacto de Javier con Brasil, su soledad con el paisaje y el encuentro con Dahlke.
Si bien ese punto de partida era troncal para la película nos faltaba trabajar lo cotidiano, ese trabajo fue laborioso en términos artesanales, seguir su día a día fue construyendo la base de esa pirámide que terminaba en ese encuentro inicial que ya habíamos filmado. Para esa instancia en Buenos Aires incorporamos una 2da cámara para todas las jornadas contamos con la presencia de Andres Thomas gran compañero de rodaje.

-¿Equipo de cámara/lentes/filtros utilizados? ¿Las razones?
La cámara con las que contamos para los documentales de Bernarda es su cámara personal una Sony A7siii, es cómoda y compacta nos permite meternos en lugares chicos que pase desapercibida, es pequeña y amable para trabajar lo inmediato que es un poco el estilo que Bernarda maneja. Una cámara que no nos ata a demasiada preparación. Los lentes variaron en el lente sony básico 24-70 y algunos lentes fijos 135 tokina, un 35 nikon y un 50 pentax adaptados a la sony.
– ¿El parque de luces?
Para Río de Janeiro pedimos un par de luces led para generar algo de relleno y sostener la luz interior a medida que fue cayendo la noche afuera y un contraluz que separe del fondo a los personajes. Y para la casa de Javier también contamos con un parque de luz chico, un par de luces led de relleno y contraluz y un pequeño HMI 575 para los exteriores o generar entrada de luz de sol en algunos espacios un poco oscuros. Queríamos una entrada de luz dura para algunas situaciones. Es bastante contrastada la situación emocional de Javier y queríamos transmitirla de alguna manera con esas entradas de luz en los fondos o en los laterales. Javier pasa sin previo aviso del movimiento a la quietud, sin escala. Había algo de esto para transmitir en la imagen.

–A lo largo del documental acompañan los momentos más íntimos de Javier Lombardo y el transitar de su enfermedad, a partir de esa premisa, ¿como pensaron el planteo de cámara e iluminación ?
No queríamos condicionamientos al respecto, por eso la elección de la cámara liviana. Sabíamos que en cualquier momento Javier iba a tener uno de esos momentos de “stop” y había que estar preparados para eso. Javier dejó claro desde el principio que quería mostrarse y mostrar lo que le pasaba, le parecía importante, el alma del documental quería exponernos a nosotros y a los espectadores ese momento y no sabíamos cuándo iba a suceder. Javier nos contó con precisión que sentía, como se le paraliza el cuerpo y que tiene que hacer cada vez que eso sucede. Teníamos entonces una imagen de lo que hacer con mucho respeto y paciencia. Estábamos en la clase de música y Javier se había olvidado de tomar la medicación. Entonces fuimos a buscarla los dos solos con la cámara, en ese momento cuando estábamos en su habitación tuvo un episodio de stop, él me fue narrando lo que le pasaba y fui filmando cada parte, él quería asegurarse de ese registro , lo construimos juntos, con mucho respeto y mucho amor. Fue uno de los momentos más valientes y que valoro mucho del documental. De mucha entrega.
Otra escena que planteamos técnicamente fue él y la relación con la calle. Javier tiene una sensación de velocidad cuando está en la calle. Todo pasa muy rápido o él va en cámara lenta. Entonces planteamos transmitir esa sensación de vértigo que tiene Javier antes de cruzar una calle. Elegimos un par de cruces de calles de mucha actividad y la idea era verlo a él en una velocidad y al tránsito en otra. Para eso trabajamos con el shutter lento para que pudiéramos ver la estela de los autos en la imagen.

–Contanos un poco del proceso de Corrección de color ¿dónde se realizó? ¿Qué buscaron potenciar de lo logrado en rodaje y qué buscaron conservar? ¿Cuánto tiempo llevó?
Lo primero que trabajamos con la colorista Lucila Kesselman fue el material de archivo con el que contaba Berni para la película. Establecer un criterio unísono para ese material que tenía varios orígenes; porque había películas, material casero familiar y entrevistas previas a nuestro trabajo. Para este material probamos filtros de textura que no quedaron , hicimos varias pruebas; lo que más trabajamos fue la recuperación de zonas medias que el material tenía guardadas y no estaban del todo perdidas y así tener una mejor lectura de la imagen.
En trabajo para la mayoria de las escenas de la casa y de Buenos aires fue recuperar un poco más el tono piel y restar las influencias del tono amarillo de la pared y saturar un poco más los azules para generar contrapunto. Y el trabajo en toda la secuencia de Río de Janeiro fue respetar esa imagen nostálgica y azul-cyan que tiene la imagen inicial. Cuando viajamos nos recibió un Río de Janeiro gris cianótico que quisimos mantener. El espacio expresaba algo de lo que estábamos viviendo en ese encuentro con Javier y Dahlke. Algo nostálgico y trascendental.
-¿Ante la película terminada, pensás que hoy habrías hecho algo diferente?
Es interesante la pregunta. Yo no suelo pelearme con lo que hice, creo que repetiría las estrategias, me parece que fueron acertadas porque nos llevaron a tener una película íntima.
-Alguna anécdota o comentario que quisieras compartir que no se te haya preguntado (destacar algún punto del proyecto, escena, decisión, etc) .
Si, me gustaría rescatar la confianza mutua entre Bernarda y Javier para este proyecto y la confianza de ambos en mi trabajo de cámara. Creo que eso fue vital. Javier tiene mucho sentido del humor y poesía, muchos de los momentos poéticos surgen de la observación y de “dejarlo hacer” frente a cámara, de esa complicidad entre nosotros. Me quedo con dos imágenes: la imagen de Javier jugando con el paraguas en Río de Janeiro filmada el primer día de rodaje y la imagen final del documental de un amanecer en San Isidro filmado el último día de rodaje.

-¿Podrías contarnos cómo comenzaste en este medio?
Sí. Estudié dos carreras, hice Diseño de Imagen y Sonido en la UBA y Dirección de Fotografía en la ENERC. La UBA me dio una visión integral del cine, una visión muy amplia y una conciencia de compromiso con lo que se está contando. El ENERC me dio la práctica con las luces y las cámaras, el ejercicio del trabajo en equipo y la ocupación del oficio en diferentes roles. Después fuí ayudante en la cátedra Bornia en la UBA, allí conocí a Alberto Masliah quien me dio la oportunidad de ser Directora de Fotografía de sus proyectos. Ese fue el inicio de mi carrera y gran parte de mi desarrollo como DF lo hice en la productora Sombracine SRL. Esa misma productora fue la que me impulsó en mi búsqueda como realizadora, allí también junto a Alberto pudimos desarrollar “La larga vida de los recuerdos” mi primera película como directora.
-¿Tenes un/a artista, director/a, libros de esos que revisitas periódicamente que son fuente de inspiración/admiración?
Me interesa el cine de Agnes Varda. Tengo una estampita que me imprimió Mariana Bruno (foquista y camarógrafa de mis proyectos) que nos acompaña en todos los rodajes. La frescura de su cámara, la desfachatez e inmediatez con la que trabaja sus películas hay algo urgente en su registro: una urgencia impresionista. El cine de Andréi Tarkovski y el de Krzysztof Kieślowski son fuente de inspiración para mi, vuelvo muchas veces a sus imágenes.
Me interesa el impresionismo, el surrealismo y la pintura de los holandeses del siglo XVII creo que mi mayor influencia es la pintura en general y sobre todo la luz de Rembrandt.
Me estimula mucho la lectura, siempre saco cosas, es una gran fuente de inspiración. Por ejemplo, cuando tuve que trabajar para el género policial en “Lobos” de Rodolfo Duran me inspiré en la atmósfera que maneja Henning Mankell en sus escritos, la neblina, esa niebla que genera vacío y es metáfora de lo perdido que puede estar un personaje en su propia historia, algo de eso dejé traslucir en la propuesta estética de “Lobos”. La música también me inspira. Cada proyecto es único y las fuentes de inspiración son múltiples, tambíen me gusta estar abierta a las fuentes y referencias de las personas con quien trabajo, eso es muy nutritivo para mi y hace que los proyectos crezcan y yo con ellos.

Bernarda Pagés, Javier Lombardo, Mariana Russo, Cintia Micheletti
Equipo“La vida de a ratos”
FICHA TÉCNICA
Producción general: ARTE EN ACCIÓN. CINTIA MICHELETTI. BERNARDA PAGÉS. JAVIER LOMBARDO.
Dirección: BERNARDA PAGÉS Y JAVIER LOMBARDO
Guión: BERNARDA PAGÉS
Producción ejecutiva: CINTIA MICHELETTI
Asistente de dirección: OLIVIA NUSS
Dirección de fotografía y cámara: MARIANA RUSSO (ADF)
Cámara: ANDRÉS THOMAS
Dirección de sonido: SEBASTIÁN RODRÍGUEZ
Montaje: EMILIANO SERRA
Postproducción de sonido: JUAN KRYMKIEWICZ
Corrección de color: LUCILA KESSELMAN
Música original: JOAQUÍN LOMBARDO
Producción musical: JOAQUÍN LOMBARDO, NICOLÁS KUHNERT
Traducción y subtitulado: NIEVES CHACÓN
Diseño de afiche: LOURDES AÑASCO
Julio de 2025